• Símbolo: Virote roto de ballesta sobre escudo
  • Alineamiento: Legal Maligno
  • Áreas de Control: Creación de armas mágicas, artesanos, magia, enanos grises.
  • Dominios: Arte, Enano, Ley, Magia, Mal, Metal, Protección.
  • Arma Predilecta: Mazoadusto (martillo de guerra)
  • Escenario: Reinos Olvidados

El patrón de los enanos grises. Ve su forma de gobernar y de pensamiento como la única válida y esta peleado con el resto de los dioses enanos, incluso con

Historia/Relaciones

Pocos son los que saben las razones que hay detrás de la expulsión de Laduguer de la Morndinsammman. Según los enanos dorados y escudos fue expulsado por haber cometido los crímenes más horribles contra sus hermanos y que solo se libró de la furia de Moradin por medio de la intercesión de Berronar.

Según los duergar Laduguer fue exiliado al presentar una nueva filosofía justa e innovadora que ofendió tanto al Padre de los Enanos que lo exilió.

Relaciones

Laduguer mantiene una situación tensa con el resto del panteón enano. Odia profundamente a Moradin pero es tolerado por Dugmaren y Sharindlar. Su única aliada es Duerra de las Profundidades que se cree que es su hija.

Laduguer mantiene diversos enfrentamientos con los dioses de la Infraoscuridad. Compite con drow por el control de las steeders y se sabe que esta enfrentado a Ilsine por una disputa que tuvo lugar hace milenios. También esta enfrentado a Orcus por haberle robado la adoración de los duergars de las Montañas Galena.

Laduguer suele enviar para mostrar su voluntad a seres como mefits, azers, baatezus, nagas de hueso, banelar, nagas oscuras, elementales de tierra, insectos elementales e tierra, mefits de tierra, golems martillo, horrores acorazados, devoradores de intelecto, imps, mefits minerales, dragones de óxido, hombres-tejón y yugoloths.

Para mostrar su favor suele hacerlo mediante el descubrimiento de adamantita, zafiros negros, piedras de sangre, diamantas, hizagkuur, mithril y plata.

Dogma

Los hijos de Laduguer han rechazado a los irresponsables y débiles dioses de sus antecesores y se han alejado de su holgazán antiguo pueblo para no ser tentados por su debilidad. La obediencia estricta a los superiores, la dedicación al arte de cada uno y el trabajo duro sin fin son necesarios para alcanzar riquezas seguridad y poder. Nada es nunca fácil, ni debería serlo. Sufre el dolor estoicamente y permanece inmutable, porque mostrar o incluso sentir emoción es demostrar debilidad. Aquellos que son débiles son de poco mérito y sufrirán un destino apropiado. La adversidad es la forja de Laduguer, y los duros caminos por los que los duergar deben pasar son los golpes de su martillo: resístelo todo y te harás más duro que la adamantina.

Clérigos de Laduguer

Para los enanos grises no hay diferencia entre autoridad religiosa y secular por lo que los clérigos de Laduguer (que son conocidos como zhuldor, es decir, “aquellos que resisten”) son los principales dirigentes de las comunidades duergar.

Los clérigos de Laduguer han servido de guía y como nexo de unión de los duergar desde hace siglos. Como protectores de las comunidades son los responsables en los temas militares y se encargan personalmente de cuidar, alimentar y entrenar a los steeders.

Con el fin de preservar la unión de los duergar los clérigos de Laduguer incitan a la xenofobia permitiendo solo el comercio con otras razas en condiciones muy concretas y lejos de las fortalezas duergar.

Por otro lado, se espera de los clérigos de Laduguer que sean hábiles en la artesanía, especialmente en las armas mágicas. Los clérigos de mayor edad suelen ser los artesanos de mayor habilidad de cualquier comunidad de enanos grises.

Los novicios de Laduguer son conocidos como los Sin Endurecer. Los clérigos de pleno derecho son conocidos como Las Capas Severas. Los títulos de los clérigos son los siguientes: Adepto Profundo, Oscuro Artesano, Artesano Invisible, Tejedor de la Runa, Guardián Adusto y Guerrero de la Perdición. Los Altos Ancianos tienen títulos propios pero son conocidos de forma global como los Arduques de la Penumbra Gris.

La iglesia de Laduguer esta formada básicamente por enanos grises (99%) aunque algunos enanos dorados, escudo y salvajes sirven a Laduguer pero son una minoría. Cada la totalidad del clero es masculino (95%) y al menos dos tercios de él tienen ciertas habilidades psiónicas.

Dentro de la ciudad de Gracklstugh la fe de Duergar cuenta con los Guardianes de la Llama un grupo de clérigos psiónicos que se encarga de vigilar y proteger al dragón Themberchaud (que proporciona el fuego necesario para mantener las fraguas de la ciudad).

Otro grupo son las Lanzas Grises de los Steeder Enmarañadores un grupo de duergars que sirven como caballería de élite de los ejércitos de los enanos grises. Son clérigos, guerreros y cruzados altamente preparados para luchas en zonas subterráneas.

Los ropajes de los clérigos de Laduguer consisten en armaduras de metal utilitarias y capas con capucha, de color gris, que les dan el nombre de Capas Adustas.

El símbolo sagrado de la fe es una gema de cualquier tipo. Esta gema presenta un corte profundo, partiendo casi la gema por la mitad, dejando una parte perfecta. Para muchos duergar esta gema simboliza su separación del resto de la raza enana y su superioridad sobre aquellos que los han rechazado.

Rituales

Los clérigos de Laduguer rezan para sus conjuros por la mañana justo antes de empezar a crear, diseñar o mejorar un arma mágica.

Dentro de la fe de Laduguer existen pocas ceremonias y la única que se celebra de forma regular es en Hibernal y se conoce como Nuevas Adustas. Es un día en que los duergar no trabajan y en donde el papel principal recae en las historias que los clérigos de Laduguer cuentan sobre las pruebas que han sido los enanos grises a lo largo de su exilio.

Los Arduques también convocan días sagradas conocidos como la Penumbra Gris después de grandes victorias o cuando enanos dorados o grises son capturados. A pesar de que durante esta celebración los enanos siguen trabajando, se les suele conceder tiempo para escuchar los relatos de las hazañas de los guerreros, examinar el botín o participar en la tortura y muerte de los prisioneros.